Te enseñamos cómo hacer leche de avena, también conocida como bebida de avena, a través de una sencilla receta que puede poner en práctica cualquier cocinillas o principiante en el mundo de la cocina.
¿Estás buscando alternativas a la leche de origen animal? Si quieres comenzar a incluir en tu dieta algún tipo de leche vegetal, quizás la leche de avena sea una de las opciones que puedes empezar a probar, ya que se trata de un tipo de bebida vegetal muy sabrosa, con una gran cantidad de nutrientes y también es digestiva.
¿Te hemos convencido? Pues si prefieres hacerla tú mismo en lugar de comprarla ya envasada en el supermercado, en el siguiente artículo te contamos paso a paso la receta de leche de avena casera para que puedas prepararla en tu cocina en pocos minutos. ¡Manos a la obra!
¿Qué es la leche de avena?
La leche de avena es una de las bebidas vegetales más populares y que más suele gustar a las personas debido a su sabor ligero y su punto de dulzor. En caso de que seas intolerante a la lactosa o estés buscando algún tipo de bebida que sustituya a la leche de origen animal, esta bebida de avena es una alternativa perfecta gracias a su gran sabor y sus excelentes propiedades para la salud. Además, este tipo de leches vegetales se digieren mucho mejor que las leches de origen animal. En otros artículos del blog te contábamos cómo elaborar leche de coco o leche de almendras casera.
Y es que la avena es un tipo de cereal muy completo y equilibrado, pues aporta a nuestro organismo una gran cantidad de fibra, proteínas (en mayor proporción que otros cereales), carbohidratos, grasas saludables (en su mayor parte insaturadas), minerales y vitamina B, entre otros. Con todos estos nutrientes… ¿a qué estás esperando para incorporar la avena en tu dieta? Una buena manera de hacerlo es a través de la receta de leche de avena casera que te vamos a mostrar a continuación.
Cómo hacer leche de avena casera
Hacer leche de avena casera es tremendamente sencillo y tardarás tan sólo unos minutos en tenerla lista. A nosotros nos encanta tomarla fresquita, especialmente durante los meses más calurosos del año, pero también puedes consumirla caliente, añadirle cacao o utilizarla en otras recetas de cocina, tanto dulces como saladas.
Si quieres descubrir cómo se hace la leche de avena con esta receta, tienes todos los detalles a continuación.
Ingredientes
- 1 l de agua
- 80 g de copos de avena
- 4 dátiles (si pueden ser de la variedad Medjool mejor que mejor, ya que son más jugosos y sabrosos)
- Pizca de sal
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
Utilizaremos la sal para resaltar e intensificar el sabor de la avena, ya que es muy útil en este sentido. También emplearemos los dátiles y el extracto de vainilla para darle a nuestra bebida vegetal de avena un puntito de dulzor, que resulta muy agradable para el paladar. No obstante, en caso de quieras utilizar esta leche de avena casera en recetas saladas es conveniente que la elabores prescindiendo de los dátiles y del extracto de vainilla, ya que así tendrá un sabor neutro.
Así que si ya tienes todos estos ingredientes en tu despensa, ahora ya no tienes excusas para comenzar a preparar esta receta de leche de avena.
Receta de leche de avena paso a paso
- Introduce en un bol los copos de avena, cúbrelos con agua y déjalos en remojo durante, al menos, 60 minutos. Este paso es muy importante ya que la avena debe hidratarse. En caso de que utilices granos de avena en lugar de copos, deberás ampliar su tiempo de remojo. En este último caso sería recomendable dejar hidratar los granos de avena, al menos, durante unas 6 horas.
- Transcurrido este tiempo, cuela la avena y enjuágala con agua fría.
- A continuación, en una trituradora o robot de cocina introduce los copos de avena, el litro de agua limpia, los dátiles deshuesados previamente, la pizca de sal y el extracto de vainilla. Tritura la mezcla durante unos 5 minutos. Deja reposar durante otros 60 minutos para que nuestra bebida vegetal se impregne bien de todos los sabores y aromas del resto de ingredientes.
- Tras el segundo reposo, cuela la mezcla con un colador fino, un colador de gasa o una bolsa de nylon especial para filtrar, para separar la bebida del resto de ingredientes sólidos. Nosotros repetimos este proceso una vez más para asegurarnos de haber eliminado por completo toda la pulpa o impurezas, ya que no nos gusta encontrarnos restos sólidos en la bebida.
- Guarda tu bebida vegetal de avena resultante en un recipiente hermético y métela en el frigorífico. Podrás consumirla durante 4-5 días como máximo, tiempo durante el cual se mantiene en perfectas condiciones.
¡Listo! Ya tienes tu propia leche de avena casera preparada para tomarla directamente o también puedes utilizarla para acompañar unos cereales o elaborar otro tipo de recetas. Por ejemplo, puedes utilizarla para elaborar postres como torrijas caseras, arroz con leche de avena o crepes, entre otros.
También puedes aprovechar la pulpa que has obtenido como resultado de colar de leche de avena casera. Puedes utilizarla para añadir como topping de yogures o helados caseros de crema e incluso para hacer unas galletas de avena.
Beneficios de la leche de avena
Tal y como hemos comentado al inicio de este artículo, la leche de avena es un tipo de leche vegetal con propiedades muy beneficiosas para nuestro organismo, gracias a todos los nutrientes que posee este cereal. Entre los principales beneficios de la avena para nuestra salud podemos destacar los siguientes:
- Ayuda a reducir el colesterol
La avena es un cereal rico en beta-glucanos, un tipo de fibra soluble que ayuda a regular de manera natural los niveles de colesterol en la sangre. En este sentido, los beta-glucanos contribuyen a limitar la absorción del colesterol por parte de nuestras células y, por tanto, a proteger nuestro corazón.
- Regula los azúcares en sangre
Estos mismos beta-glucanos de los que te hablábamos en el apartado anterior también limitan la absorción de azúcares por las células. Esto es debido a que estas fibras solubles crean una capa gelatinosa en nuestro intestino que reduce la absorción de los azúcares en la digestión. De esta manera, la avena es un alimento muy recomendable para las personas que tengan diagnosticada diabetes de tipo 2.
- Es saciante
Se trata de un alimento que mantiene a raya el hambre gracias a su contenido en carbohidratos de absorción lenta. Esta característica saciante convierte a la avena en una alternativa ideal para aquellas personas que quieren perder peso.
- Favorece la digestión
Debido a su contenido en fibra, la avena es un alimento perfecto para las personas que tienen estreñimiento y otros problemas digestivos. Su consumo mejora el tránsito intestinal facilitando la digestión de otros alimentos.
- También es beneficiosa para el sistema nervioso
Esto es debido a la presencia de vitaminas del grupo B (especialmente B1) en la avena, que refuerzan el funcionamiento del sistema nervioso a la par que ayudan a estimular la concentración.
Estas son solo algunas de las propiedades de la avena, pero aún hay más pues tiene propiedades antiinflamatorias y es antioxidante. Por si esto fuera poco, también es muy útil para aliviar problemas en la piel como rojeces o eccemas.
Está claro que con todas estas cualidades la avena se convierte en uno de los cereales más saludables y beneficiosos para tu organismo. Por ello, una buena manera de introducirla en tu dieta semanal puede ser a través de esta rica leche de avena casera. ¿Te ha gustado nuestra receta? Cuéntanos tus impresiones en el hilo de comentarios de este artículo.
¡Buen provecho!
